Los socios del silencio

En la historia reciente de River hay una conducta que se repite. Amenazar con decir la verdad sobre ciertos actos ilícitos para lograr el objetivo y después guardar silencio con lo cual siempre reina la joda. En los primeros tiempos del reinado de Passarella se alardeaba de una historia sobre las elecciones en River festejada en las cenas de amigos que frecuenta DAP, en las mesas de Gardiner o de cualquier otro de los restaurantes elegidos por él, donde recordaban que ya entrada la madrugada del 6 de diciembre, en pleno recuento de votos, a Passarella lo alertaron los pasillos del Monumental: "Daniel, nos están robando votos, colgaron el sistema tres veces, usan el aparato en nuestra contra".

Parece que Passarella gritó en medio de una súbita irrupción de rabia: "Llamá al periodista de Crónica TV, voy a hablar" y antes de ponerse frente a la cámara, mandó a una persona de su confianza que llamara a Aguilar para que sintonizara ese canal. Como cuenta Jorge Lopez en la nota "El Llamado" parece que ahí recuperó su bravura de defensor y clavó una espada de Damocles sobre la coyuntura desfavorable: "Cuando me fuí del club, dije que algún día llegaría el momento de hablar. Si me llama el Juez que lleva las causas de Aguilar, quizás ahora hable", amenazó. Alrededor del presidente juran que esa acción definió la elección. "Ahí, el aparato lo dejó ganar. Ahí se dieron cuenta de que Daniel no estaba jodiendo".

Uds. dirán: ¿a qué viene esto ahora después de 20 meses y todavía padeciendo la humillación del descenso? Es que hoy se publicaron en La Nación las declaraciones de J.J., soldado dado de baja, luego de un largo tiempo de silencio alejado de la guerra mediática y de preferir la cautela antes que avivar más el fuego de un River convulsionado.

Sus palabras precisas al respecto fueron: "Nadie me puede reprochar nada. Me hago responsable porque no se dieron los resultados, pero con el diario del lunes es fácil opinar".

En la nota J.J. responsabilizó a un sector de la oposición por la pérdida de la categoría y manifestó que "hay un grupo que tiene mucho poder económico, que no es del oficialismo, y quiere estar en el club a cualquier costo. Y también hay gente en River que no es de River. Quieren hacer política y mueven hilos en beneficio propio. Por ejemplo, sabíamos que iban a invadir la cancha contra Belgrano y también que romperían todo en la Centenario", argumentó en declaraciones para Radio La Red.

A continuación confesó que en las últimas semanas que el plantel luchó por quedarse en primera "había un clima pesado y eso se sintió; había muchos intereses creados". Y agregó sobre esta situación: "La idea era salvarse cuando faltaban cinco o seis fechas, porque si no la tormenta iba a ser grande. La empujaron desde afuera y cuando entró ya era imposible sacarla".

Amplió el análisis: "No tuvimos refuerzos por la mala situación económica del club y éramos conscientes de la parada que teníamos enfrente. Había un plantel justo y se debían buscar cambios según el momento. Hicimos una gran pretemporada y arrancamos bien, pero cierta parte de la prensa insistía que nuestra propuesta no tenía que ver con la historia de River. Había muchos jóvenes y esa ambición del entorno nos deterioró", se justificó López.

Como vemos el soldado también es leal a los códigos que rigen en nuestro River. Amenazar sin dar nombres, tirar data sin precisar los hechos, en definitiva ocultar a los socios la verdad e impedir que se conozca como y quienes desvastaron a River en lo institucional, en lo económico y en lo futbolísitico.

Es que en realidad no quieren a River, porque si fuese cierto que aman al Club como a su casa deberían ponerse a disposición de un Juez para contar lo que saben y mientras tanto someterse a los cientos de preguntas que los socios tenemos derecho a hacerles para conocer la verdad, ya que somos millones de riverplatenses los que sentimos el dolor de la mayor humillación padecida en 110 años de historia.

Entrada:

¿Quienes deberían responder a las preguntas de los socios?

¿Qué preguntas querrías hacerles?