Tras varias reuniones Gallardo llegó a un acuerdo económico con la dirigencia de River para hacerse cargo de la dirección técnica transcurridos sólo unos 18 meses desde que se despidió de El Más Grande, recordando que todas las veces que se fue, nunca estuvo más de cinco años alejado del Millo y lo mismo pasó en esta oportunidad.
La dirigencia riverlatense a las 19 del sábado pasado decidió rescindir el contrato de Demichelis, dado que Brito consideró que la situación irreversible, atento el enojo de la hinchada y críticas periodísticas, sumadas a los malos rendimientos y resultados -sólo acumuló 4 puntos de 12 en la Liga Profesional , perdiendo con rivales de mucha menor jerarquía.
Sin embargo, la anticipada rescisión del vínculo contractual con Martín Demichelis, no es mera consecuencia de una gestión futbolística, sino el primer síntoma hecho público de la feroz interna oficialista rumbo a las elecciones generales que se celebrarán en Diciembre del 2025.
En efecto, las instancias previas a la despedida del ténico, evidenciaron -por primera vez publicamente-la división existente dentro del seno de la Comisión Directiva a raiz de los comicios que elegirán al sucesor del presidente Jorge Brito quien no podrá presentarse para una reelección por razones estatutarias.
El gobierno actual, nació a fines del 2013 con la alianza electoral encabezada por D’Onofrioy otros dirigentes que logró imponerse en las elecciones riverplatenses de ese año, asumiendo una nueva gestión tras el desvastador cuadro institucional, en el que había quedado el Club River Plate tras las gestiones encabezadas por Aguilar y Passarella.
Si bien D’Onofrio, contando con la presencia de Marcelo Gallardo, gobernó exitosamente dos ciclos consecutivos entre el 2013-2017 y el 2017-2021, a raiz de un cambio estatutario acordado a fines del año pasado entre las filas oficialistas y la complaciente minoría, River ya no podrá reelegir a su presidente.
La aceptación por parte de Brito y su entorno a la modificación estatutaria sorprendió, pero fue interpretada por el periodismo como una forma de mantener unido al oficialismo, aunque en realidad era consecuencia del acuerdo arribado -allá en el 2013- entre los principales dirigentes que conformaron la alianza que entronizó a D’Onofrio como presidente entre el 2013 al 2021.
Así las cosas, sin la figura de D’Onofrio -que dejó el club en 2021- y con Brito fuera de competencia, contando con una oposición débil, el oficialismo se preparaba para elegir a Patanían -actual Vice 1º y a cargo del fútbol junto a Francescoli- como su candidato a las próximas elecciones.
Desde muy larga data Patanian tiene el anhelo de ser presidente y pensó que podría ser candidato en 2021, pero D’Onofrio bendijo a Brito, a quien acompañó como vice, convencido el hombre del grupo Eurnekian que sería el candidato a presidente en el 2025.
Stefano, quien por cinco años presidió el Departamento de Comunicación, Medios y Digital y desde febrero del 2018 el Área Educativa del Club, siguió acumulando espacios de poder -sólo le resta el fútbol- desde que fue nombrado Secretario General de la Institución, ya dejó en claro que quiere ser el próximo presidente.
Una parte de la CD hasta el sábado por la tarde sostenía que Micho podía recuperarse yllegar al cruce ante Talleres por los octavos de final de la Libertadores, el 14 de agosto. Pero no podrá ser porque Brito anunció que ya no será más el técnico de River, dado que no todas las autoridades querían lo mismo respecto a Demichelis porque el asunto a tener en cuenta es más profundo: Quedó al desnudo la existencia de una "grieta" abierta por la lucha por la presidencia 2025-2029
. Si bien el entrenador era apuntado como el principal responsable por los malos resultados en las últimas fechas y de hecho, en la previa del partido ante Sarmiento existía la sensación que el Monumental se iban a gritar cosas muy fuertes. Brito encontró una salida, de común acuerdo con el entrenador, como una manera de descomprimir el clima espeso que se venía respirando a través de las redes sociales - sea por reales hinchas de riverplatenses o por trolls contratados que también pululan en la comunicación digital.
Y la salida del DT,para el pueblo riverplatense vino con una gran esperanza bajo el brazo: El retorno del ídolo Marcelo Gallardo como sucesor generando la sensación de tener otra vez a mano al piloto de tormentas que supo conducir los destinos de River como muy pocos.
Pero no se puede soslayar que la dirigencia desperdició la oportunidad de cambiar al técnico a la apertura del mercado de pases y con tiempo para que el nuevo DT pueda conocer al grupo y trabajar "sin urgencias". Es una patética irresponsibilidad del trío que toma las decisiones futbolísticas Brito, Patanian y Francescoli
Es inaudito el tiempo que perdió la dirigencia manteniendo a Demichelis en el cargo tras los papelones con Temperley y Riestra. Algunos consideran que la continuidad de Demichelis a partir de la derrota con éste último ya se encontraba en medio de una feroz interna dentro del oficialismo entre los aspirantes a suceder a Brito
Como se dijo arriba, uno es Matías Patanian -quien al frente del Consejo de fútbol eligió conjuntamente con Francescoli a Demichelis que defendía su continuidad a capa y espada, mientras que el otro es Stéfano Cozza Di Carlo. Entre ambos luchan por la candidatura dentro del espacio oficialista.
Ahora bien, tras la derrota en Mendoza la disputa, montada en la calentura de gran parte del pueblo riverplatense por la marcha futbolística del equipo, pasó a ser una batalla que en la semana quedó fuera de control con recíprocas acusaciones personalizadas entre ambos sectores.
Brito respaldó hasta último momento la decisión de los encargados de fútbol, o sea de Patanian y Francescoli, de avalar a Demichelis, pero temeroso que el domingo se produjera una pueblada en el Monumental -quizás alentada desde algún sector oficialista- el sábado anunció el punto final al ciclo Demichelis.
Faltan poco más de 17 meses para las elecciones y aunque se presume el apoyo de Brito a Patanian en aras de respetar el acuerdo inicial, no es descartable el rol que asuma D’Onofrio en la definición tomando en cuenta que el nuevo estatuto, obliga que una de las vicepresidencias debe ser ocupada por una mujer.